Hay quien dice que no hemos cambiado tanto. Que los jóvenes de ahora son como los de nuestra época, sólo que en vez de jugar con coches hechos con latas de sardinas juegan con teléfonos móviles y videoconsolas.
Está claro que no son ellos los que han cambiado, porque cuando para mi una lata de sardinas llena de agua atada a un cordel era un camión de bomberos ellos ni existían, pero nosotros...
Recuerdo que si te pillaban en la escuela jugando con la lata de sardinas el profesor te la quitaba, y hasta era posible que te diera algún cachete. Por supuesto intentabas por todos los medios que tu padre no se enterase de que Don Juan te había tenido que llamar la atención, ya que si lo hacía, al llegar a casa tenias reprimenda y castigo.
Ahora los profesores ya no son "Don Pedro" o el "señor Martin", ni siquiera la señorita Pilar o Javi, el profesor colega de gimnasia. Ahora son "joder tio" y similares. Y cuidado con quitarle el móvil a un alumno que se pasa la hora de clase mandando mensajitos, ya que acabo de leer que eso se puede denunciar, y hay quien incluso gana el juicio, y el "joder tio" que intentaba dar clase sin el molesto soniquete de las teclas del dichoso aparatito se ve obligado a pagar 300 euros de multa por "enriquecimiento ilícito".
Tiene cojones.